Introducción
Aunque se está dando una transición lenta en el uso de fuentes de energías fósiles, en que el petróleo y el carbón bajan su participación y suben el gas natural y las fuentes nuevas y renovables de energía, falta mucho por hacer para tener una economía descarbonizada en el mundo.
La izquierda debe avanzar hacia un nuevo paradigma que rompa con el capitalismo. Se discute mucho sobre el tema de la transición energética. Unos hablan de un Pacto Verde, la tendencia liberal, otros de un Nuevo Pacto Verde, la tendencia progresista estadunidense, y otros de un pacto ecológico-social que va más allá del Nuevo Pacto Verde.
Como muestran las cifras que se mencionan más adelante, Colombia tiene una participación muy alta de los combustibles fósiles en la demanda de energía primaria interna y en las exportaciones, por el peso del petróleo y el carbón.
Un Nuevo Pacto Verde radical implica eliminar en la medida de lo posible el consumo de petróleo y carbón, los energéticos más contaminantes, lo que significa pasar de una economía extractivista a una más variada, en que predominen otros sectores productivos. Ahora, hay que utilizar la transición energética para esto, precisamente, lo que implica que no todo provenga del exterior, sino que sirva para crear nuevas fuentes de producción y trabajo. Sigue en DESCARGA arriba