Reales e Irreales Gestores de Paz

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Graduar como โ€œgestores de pazโ€ a quienes no han transitado todo un camino de cambio y mayor conciencia es un abuso de tรฉrminos y de alguna manera revela lo que entiende este gobierno por paz.

 

Sri Aurobindo, uno de los personajes mรกs importantes de la India en el siglo XX, fue hasta los 36ย  aรฑos un activista polรญtico de primera lรญnea en el movimiento independentista de ese paรญs. Trabajรณ por la causa india con devociรณn. Pero no fue por esto que pasรณ a la historia. Es reconocido principalmente como una de lasย  mรกs destacadas figuras espirituales de la India de los รบltimos siglos. Esta afirmaciรณn es de grueso calibre teniendo en cuenta la tradiciรณn del oriente en este terreno.

En 1908, veinte aรฑos antes de que Gandhi emprendiera en firme su gesta de liberaciรณn, Aurobindo fue encarcelado por โ€œterroristaโ€ antibritรกnico. Ya en la cรกrcel practicรณ con disciplina una serie de ejercicios de meditaciรณn y de expansiรณn de la conciencia, inicialmente con el objetivo de fortalecerse para seguir la lucha polรญtica, pero que lo llevaron a otros terrenos, a abandonar su activismo y a comprometerse hasta su muerte en 1.950 con la vida religiosa y la paz del mundo, empezando por la paz consigo mismo.

Nelson Mandela fue lรญder del brazo armado del Congreso Nacional Africano hasta ser encarcelado en 1962.

Claude Anshin Thomas, monje budista, fue combatiente norteamericano en Vietnam, con muchas victimas a sus espaldas, como รฉl mismo lo reconoce. Desde hace veinte aรฑos trabaja dรญa a dรญa alrededor del mundo sanando las heridas que la guerra deja en los espรญritus. Claro que empezรณ por el suyo, tarea en la que persiste hasta hoy.

En 1992, Francisco Galรกn del ELN fue capturado por su actividad guerrillera. Estuvo preso por 14 aรฑos. Desde un comienzo se enfrentรณ con el interrogante existencial de que hacer con su vida en la cรกrcel. Explorรณ su alma y leyรณ bastante. Desde su compromiso cristiano, el mismo que lo llevรณ a la guerra paradรณjicamente, como muchos otros miembros del ELN, emprendiรณ una profunda bรบsqueda espiritual con la temprana conclusiรณn de que por nada del mundo volverรญa a la guerra y que no serรญa nuevamente agente de violencia. Curiosamente โ€œdevorรณโ€ buena parte de los libros escritos por Aurobindo.

Quienes han participado de la guerra tienen plena autoridad para trabajar por la paz. Su experiencia, su vida, les da el conocimiento necesario, desde sus entraรฑas, para emprender esta nueva tarea. Pero para esto es requisito fundamental su propia transformaciรณn, tambiรฉn desde lo mรกs profundo de su ser. El dolor y el sufrimiento implรญcitos en el ejercicio de la violencia, que infligieron y padecieron los guerreros, son la fuente desde la que brota una nueva vida. Su conciencia profunda de lo vivido y del daรฑo inmenso que causa la guerra es la base de un nuevo corazรณn. Sรณlo a partir de esta intima transformaciรณn se puede โ€œgestarโ€ la paz.

Este veinte de julio que pasรณ, Elda Neyis Mosquera, mรกs conocida como โ€œKarinaโ€, quien fuera comandante del temido frente 47 de las FARC, azote de Antioquia y Caldas, se presentรณ en el parque principal de La Uribe, Meta, cuna de las FARC, y hablรณ ante sus pobladores. Pidiรณ perdรณn por su vida guerrillera y llamรณ a sus excompaรฑeros a que se desmovilizaran. Esta intervenciรณn la realizรณ inaugurando su nueva condiciรณn de โ€œgestora de pazโ€, figura inventada por el Gobierno para antiguos guerreros que adquieran determinados compromisos, bรกsicamente de buscar la desmovilizaciรณn de sus excompaรฑeros. Es el Gobierno quien los nombra por decreto. Muchos han querido adquirir esta condiciรณn por los beneficios materiales que conlleva.

Sรณlo Elda Neyis, en su fuero mรกs interno, conoce su motivaciรณn para ser โ€œgestora de pazโ€. Nadie tiene prueba hasta el momento de que su intenciรณn no sea genuina. Por su bien y el del paรญs, ojalรก si sea autentica.

Sin embargo, procesos individuales como los nombrados mรกs arriba enseรฑan que el cambio personal requerido para pasar de ser guerrero a trabajador por la paz sin descanso, o sea, a ser un autรฉntico gestor de paz, parte de un espรญritu transformado. Esย  mรกs dispendioso y requiere mucho mรกs trabajo que postularse para un decreto.

La deserciรณn de guerrilleros es un objetivo conveniente. Pero graduar como โ€œgestores de pazโ€ a quienes no han transitado todo un camino de cambio y mayor conciencia es un abuso de tรฉrminos y de alguna manera revela lo que entiende este gobierno por paz.

Gestar es dar a luz. Sรณlo puede hacerlo quien tiene la naturaleza para ello. Y para llegar a esta naturaleza el guerrero tiene que transformarse. Nunca un decreto a conveniencia de un gobierno puede lograrlo.
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ricardocorrearobledo@gmail.com