Es difícil sostener que el aceite de palma colombiano es un producto ‘limpio’. El estudio pretende dar un paso más en la denuncia de un modelo de producción que lleva asociadas una serie de violaciones graves, para que se ponga fin a estas prácticas que atentan contra las poblaciones y contra derechos de reconocimiento universal, se haga justicia con todas ellas, se restituyan las tierras robadas o ilegalmente apropiadas a sus dueños y por supuesto, que éstas tierras se les restituyan tal como se las arrebataron, libres de palma.
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http://www.hrev.org/media/documentos/elflujopalmaes.pdf
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