TLC Colombia-Suiza: Papaya para las multinacionales

por

Indepaz

Recientemente cientos de organizaciones colombianas y solidarias en el mundo se han manifestado en contra del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos debido a la desastrosa situaciรณn de derechos humanos en nuestro paรญs, especialmente la que afecta a los sindicalistas y defensores de derechos humanos. Sin embargo,mas bien poco, por no decir nada, es lo que desde las organizaciones de la sociedad civil, se ha hablado sobre el TLC Colombia โ€“ Suiza, el cual fue negociado desde el 2006, aprobado, de manera solapada y amaรฑada, durante el gobierno de Uribe en el aรฑo 2009, y el cual ha entrado en vigor hoy 1ยบ de julio de 2011 con la venia del presidente Juan Manuel Santos.๏ปฟ
Mientras los demรกs acuerdos de libre comercio han sido rechazados en diferentes instancias de los gobiernos correspondientes, en Suiza, en el aรฑo 2009, la entonces Ministra de Economรญa y la actual Ministra de Energรญa y Trรกnsito de ese paรญs, Doris Leuthard, justificaba vehementemente ante la Primera Cรกmara del Parlamento Suizo (Conseil National), cรณmo un acuerdo de libre comercio de tal magnitud entre los dos paรญses, contribuirรญa trascendentalmente a reducir la pobreza, ya que รฉste motivarรญa un desarrollo econรณmico extenso, el cual a su vez, ayudarรญa a aliviar la dramรกtica situaciรณn de los derechos humanos que se vive en Colombia.
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El TLC Colombia-Suiza, propone como primera medida una base de seguridad jurรญdica para los inversionistas, lo cual ha sido afirmado por el presidente Juan Manuel Santos, no solamente en mรบltiples escenarios internacionales, como en la pasada 41ยช Sesiรณn delForo Econรณmico Mundial, realizado en enero de 2011, en Davos, Suiza, en donde el primer mandatario se reuniรณ con la presidenta de รฉste paรญs, Micheline Calmy-Rey, para acordar los pormenores que permitirรญan a los dos paรญses, hacer entrar en vigencia, de manera provisional, dicho acuerdo.El presidente Santos, tambiรฉn ha mostrado cรณmo, a travรฉs de el Plan Nacional de Desarrollo y su polรญtica de minas, va a ser mucho mรกs fรกcil para las multinacionales suizas, invertir en Colombia,las cuales ademรกs obtendrรกn en concesiรณn los territorios, especialmente los de los pueblos indรญgenas,para explotar cualquier tipo de productos minerales.
Para lograr que la inversiรณn de Suiza crezca de manera segura en Colombia, el TLC elimina hasta en un 85%, y en algunos casos hasta el 100%, de cualquier impuesto o gravamen, que se debiera pagar por la importaciรณnde productos comerciales incluidos en los capรญtulos 25 al 97 del Sistema Armonizado de Designaciรณn y Codificaciรณn de Mercancรญas, los cuales se refieren a productos agrรญcolas bรกsicos y procesados, productos de la pesca y otros productos marinos, productos industriales y por supuesto, armas y productos minerales, entre otros.
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Asรญ las cosas, las inversiones suizas aumentarรกn notoriamente en Colombia, lo que significa que multinacionales del โ€œprestigioโ€ de Novartis y Roche, empresas del sector farmacรฉutico que han sido ampliamente cuestionadas en paรญses como la India por haberse involucrado en conflictos relacionados con la adquisiciรณn de patentes, comercializarรกn todo tipo de medicamentos en nuestro paรญs. Asรญ mismo Nestlรฉ, compaรฑรญa conocida ampliamente por sus conflictos laborales y la apropiaciรณn indebida de recursos hรญdricos.Tambiรฉn la UBS, el mismo banco suizo que estuvo envuelto recientemente en escรกndalos internacionales por encubrir evasores de impuestos de Estados Unidos y Alemania, tendrรก las puertas abiertas de par en par, para las y los colombianos.De la misma manera, otras empresas como Holcim, Glencore y Xstrata, dedicadas al saqueo de los recursos naturales como el cemento o el carbรณn, empresas que obviamente carecen de cualquier intenciรณn que propenda la protecciรณn del medio ambiente, seguirรกn presentes en el territorio nacional, por supuesto, con todas las ventajas y privilegios que รฉste TLC les otorga.
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Mientras las multinacionales suizas obtendrรกn con el TLC amplia seguridad jurรญdica para sus contratos mineros, asรญ como para sus patentes farmacรฉuticas y de semillas, los pueblos indรญgenas en Colombia, asรญ como las comunidades campesinas y afrodescendientes, tendremos que seguir enfrentando la nefasta situaciรณn quese traduce en la desterritorializaciรณn y la agudizaciรณn del conflicto armado en nuestros territorios.Derechos como los derechos laborales o ambientales, por supuesto, seguirรกn siendo el รบltimo renglรณn en la agenda de las garantรญas de los derechos humanos, ni hablar de los derechos colectivos, en un Estado que impuso un TLC, aprovechando la violencia y la corrupciรณn imperantes, para asegurar jurรญdicamente, a multinacionales que son mรกs conocidas por la violaciรณn de derechos humanos y la evasiรณn de impuestos que por sus buenas prรกcticas.
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Glencore International, apenas en mayo de 2011, en cabeza de su director ejecutivo, Ivan Glasemberg, ha decidido romper el silencio para lanzarse a cotizar en las bolsas de valores de Londres y Hong Kong, despuรฉs de mรกs de tres dรฉcadas de saqueo y especulaciรณn con los recursos naturales en todo el mundo,cuando se mantuvo sin obligaciรณn pรบblica alguna, evitando larendiciรณn de cuentas acerca de los movimientos financieros de sus operaciones.La razรณn para cotizarse en la Bolsa obedece a la necesidad de aumentar el patrimonio para poder disponer, en medio de la crisis mundial, de capital suficiente que le permita seguir invirtiendo en su crecimiento financiero.Glencore International es dueรฑa de Xstrata, las dos multinacionales suizas que explotan carbรณn en el departamento del Cesar, asรญ como tambiรฉn en el departamento de La Guajira en donde Xstrata, es dueรฑa del 33.33% de las acciones del Cerrejรณn, la mina de carbรณn a cielo abierto mรกs grande del mundo la cuรกl afecta, mayoritariamente el territorio del pueblo indรญgena Wayuu.
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A todas luces, un argumento como el de la reducciรณn de la pobreza para acabar con las violaciones de los derechos humanos, dando paso a la apertura de libre comercio entre Colombia y Suiza, es absolutamente cรญnico, ademรกs de hipรณcrita, sobre todo cuando viene de un paรญs que, condicionalmente, es ejemplo de democracia y cooperaciรณn de ayuda humanitaria.
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De ninguna manera, cualquier acuerdo en este contexto, ha sido consultado con el pueblo colombiano, ni mucho menos se ha estimado la consideraciรณn de garantizar el derecho al consentimiento previo libre e informado que nos asiste a los pueblos indรญgenas, de conformidad con instrumentos internacionales como el Convenio 169 de la OIT o la Declaraciรณn de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indรญgenas, o, nacionales como la Ley 21 de 1991, o las mรบltiples sentencias emitidas por la Corte Constitucional de Colombia a favor de la protecciรณn de los derechos de los pueblos indรญgenas y sus territorios.
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Para el caso del pueblo Wayuu, Wounmainkat, es decir, todo nuestro territorio, ha sido entregado en concesiones para la exploraciรณn y la explotaciรณn de recursos mineros.Por su parte El Cerrejรณn,ha anunciado para este aรฑo, el asesinato del รบnico recurso hรญdrico de la regiรณn, el Rรญo Rancherรญa, lo cual generarรก no solo el desplazamiento forzado de varias comunidades Wayuu, sino tambiรฉn un impacto nefasto a la biodiversidad y al medio ambiente, todo, en nombre de la triplicaciรณn de las exportaciones del carbรณn que estรกn proyectadas para el 2015, las cualesirรกn directamente a favorecer a las multinacionales suizas Xstrata y Glencore, quienes ademรกs planean una fusiรณn, despuรฉs de la inauguraciรณn de รฉsta รบltima en la Bolsa de Valores.ย No es casual pues, que el Ex Director de la oficina de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la Repรบblica durante los periodos de Uribe, Carlos Franco, sea hoy, el Director de Estรกndares Sociales y Relacionamiento Internacional de El Cerrejรณn.
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Definitivamente, este acuerdo comercial solo pone en evidencia, la urgencia de corroborar un sistema en donde las inversiones son mucho mรกs fรกciles, cuando se desarrollan en territorios despojados, por lo tanto, carentes de resistencia social a los intereses econรณmicos, muchos de los cuales se encuentran estrechamente relacionados con la extracciรณn de recursos naturales, lo que se traduce para ese mismo sistema, en la imperante necesidad de controlar vastas รกreas de tierras y territorios, especialmente en comunidades de pueblos indรญgenas, afrodescendientes y campesinas, promoviendo asรญ la intensificaciรณn del conflicto armado interno, en donde las vรญctimas recibimos solo paliativos como la Ley de Vรญctimas y la de Restituciรณn de Tierras, que no son mรกs que reconocer los tรญtulos de las tierras que han sido despojadas a las vรญctimas.
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Por su parte, cuando Suiza argumenta en su discurso que el TLC con Colombia mejorarรก la situaciรณn de los derechos humanos de un paรญs en donde, los mandatarios de turno se pelean para decidir si se reconoce o no un conflicto que estรก mas vivo que nunca, es aceptar abiertamente la ceguera ante las cifras y los hechos que demuestran que las y los dirigentes indรญgenas, para no nombrar al resto, estamos en permanente peligro, sobre todo en los territorios en donde se emplazan las multinacionales que instalan consigo, a los grupos armados legales o ilegales, para fundar el terror, en nombre de la protecciรณn de bienes de interรฉs pรบblico.
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Sรญ, hay que estar ciegos, o ciegas, como la mercenaria del poder econรณmico Doris Leuthard, para no darse cuenta que mรกs de doscientos cincuenta Wayuu, han sido asesinados o desaparecidos en el marco del conflicto armado interno, en donde gran parte de este Itinerario de vรญctimas, han sido mujeres Wayuu.
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Para la suma final del total del TLC Colombia-Suiza, se ha firmado un Tratado de Cooperaciรณn Judicial entre los dos paรญses, cuyo objetivo fundamental es el de luchar contra el crimen organizado, el narcotrรกfico y el terrorismo.Aunque aรบn se desconocen sus verdaderos alcances, es fรกcil deducir,teniendo en cuenta que la mayorรญa de activistas hombres y mujeres activistas de los derechos humanos en Colombia, hemos sido investigados extrajudicialmente y algunos hasta condenados, que se puede estar en alto riesgo, incluso en Suiza.
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En รบltimas, la apertura del libre comercio de Colombia con cualquier paรญs serรก como tener un corral lleno de chivos con un solo lobo, en donde por supuesto, todos los chivos estamos representados en el pueblo colombiano.Colombia, exportarรก a Suiza, entre otros productos de la lista, flores, textiles, aceites y frutas como limรณn, piรฑa y papaya. ยกBravo por Colombia! quien ha dado papaya a las multinacionales de Suiza, a cambio de que รฉstas tenganlicencia para devastar y contaminar la diversidad, el medio ambiente, la riqueza y fertilidad de nuestros suelos.
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* Wayunkerra Epinayu (Karmen Ramรญrez Boscรกn) es indรญgena Wayuu del Clan Epinayu.Epayaโ€™a Miou (Consejera Mayor) de la Sรผtsรผin Jiyeyu Wayuu โ€“ Fuerza de Mujeres Wayuu, activista de los derechos de las mujeres indรญgenas y de los pueblos indรญgenas.
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